Real Madrid ha tenido un sábado para el olvido. Primero se hizo oficial que el francés Mbpapé, luego de tantas idas y vueltas en las especulaciones, finalmente se queda en el PSG. No se cumplió el deseo de Florentino Pérez y de la hinchada blanca. Para colmo, su equipo de baloncesto se quedó a dos puntos de conquistar su undécima Euroliga.
Belgrado no pudo ser lugar de peregrinación para el madridismo. Real Madrid soñaba con levantar la Euroliga tal como sucedió hace cuatro años. No hubo undécima por ahora. Lo evitó el Anadolu Efes Pilsen de Estambúl (58-57), rey de Europa por segundo año consecutivo.
Los blancos han disputado de esta manera la 19ª final de Euroliga de su historia —diez títulos y nueve subcampeonatos—.