El Gobierno británico ha anunciado este jueves que ha congelado los activos del ruso Roman Abramovich, dueño del club Chelsea actual campeón de la Champions League, por la estrecha relación que ha mantenido con el régimen ruso durante décadas.
El Poder Ejecutivo de Londres ha publicado una lista de otros siete oligarcas a los que impone sanciones por sus vínculos con el presidente ruso, Vladímir Putin, en respuesta a la invasión de Ucrania.
“Esta relación ha incluido la obtención de un beneficio financiero o de otro beneficio material a través de Putin o del Gobierno de Rusia”, ha explicado Londres en un comunicado sobre Abramovich, a quien también ha impuesto una prohibición para viajar a Inglaterra.
En este sentido, el club no podrá celebrar acuerdos de transferencia para fichar nuevos jugadores ni recibir dinero por vender jugadores existentes, lo que constituye una prohibición de transferencia.
El Chelsea sí podrá seguir pagando los salarios de todos los empleados, incluido su cuerpo técnico y de juego. La secretaria de Cultura del gobierno británico, Nadine Dorries, ha dicho este miércoles que las medidas tenían como objetivo “privar a Abramovich de beneficiarse de su propiedad del club”. “Sé que esto genera cierta incertidumbre, pero el gobierno trabajará con la Premier League y los clubes para que se siga jugando al fútbol mientras se asegura de que las sanciones lleguen a los previstos”, ha dicho Dorries en un comunicado.