El Salvador dejó ir la victoria ante Estados Unidos en los últimos instantes
El Salvador recibió a la selección de los Estados Unidos en el tercer partido de la CONCACAF Nations League en el Estadio Cuscatlán.
El encuentro comenzó con un gran ímpetu para los nacionales que empezaron a robar balones en área rival. El resultado de uno de esos baldones fue un centro al área por parte de Bryan Tamacas, que no pudo conectar de gran manera Nelson Bonilla.
Pero poco a poco los estadounidenses reencontraron el balón. Christian Pulisic fue una completa pesadilla por el sector izquierdo, cada balón qué pasó por el “10” era peligro inminente. Pero pese al peligro visitante, los locales lograban conectar pases que eran jugadas trabajadas sembraron cierto entusiasmo en la grada del Coloso de Montserrat.
Los nacionales regresaron con su plan de recuperar el balón en área rival y en una de esas acciones Kevin Reyes realizó un tiro de esquina que fue a encontrar el pie de Bonilla, quien le cedió el balón a Larín y este no dudó en centrar. El centro fue envenenando y se coló en la meta del portero estadounidense, El Salvador se fue ganando al mediotiempo 1-0.
El inicio del segundo tiempo fue muy similar al primer tiempo, debido a que los nacionales trataron de robar balones. El factor a tomar en cuenta para los primeros minutos de la segunda mitad fue el factor físico, en una de las jugadas más claras de los norteamericanos, Yunus Musah agarró el balón y se en ruta a gol, pero Mario Gonzalez ahorro el grito de gol visitante.
El partido perdió todo el sentido tras la fuerte entrada de Paul Arriola que provocó la primera tarjeta roja del partido. Poco después Darwin Cerén armó un contragolpe que no pudo finalizar Roberto Molina, dicha acción finalizó en contragolpe estadounidense que provocó la segunda tarjeta roja del partido, con la expulsión de Ronald Rodríguez tras una acción de emergencia en donde significaría el empate visitante.
Los últimos minutos fueron de total agonía, pero el gol a balón parado de Jordan Morris hizo silenciar el estadio en su totalidad. Las jugadas siguientes fueron puro trámite a esperas de que finalizara el encuentro.
El Salvador volvió a empatar contra Estados Unidos como en la Octagonal final, pero esta vez la polémica arbitral no pudo faltar. Los nacionales se fueron con un sabor de boca amargo, pero mejoraron gratamente lo mostrado en partidos anteriores.